El impacto de la inteligencia emocional en el éxito empresarial

inteligencia emocional en las empresas

La inteligencia emocional es la capacidad de identificar y gestionar las propias emociones y las emociones de los demás, una habilidad muy demandada en las empresas hoy en día por los resultados que pueden obtenerse en la gestión motivacional y la búsqueda de talento.

En este artículo te hablaremos sobre qué es y cómo aplicar inteligencia emocional en tu negocio en la gestión de los recursos humanos.

¿Qué es la inteligencia emocional?

El término fue acuñado por primera vez por dos psicólogos en 1990, Peter Salovey y Hohn Mayer. Ellos definieron la inteligencia emocional como “la capacidad de razonar sobre las emociones y de regulación emocional, empatía y habilidades sociales”.

No fue hasta 2007, cuando Daniel Goleman, la popularizó en su libro "Inteligencia emocional: Por qué es más importante que el cociente intelectual" y cuando empezó a tomar mayor relevancia en las empresas y organizaciones.

Hay cinco componentes que conforman la habilidad de la inteligencia emocional, siendo la autoconciencia, autorregulación, motivación, empatía, habilidades sociales.

  • La autoconciencia es la capacidad de reconocer las diferencias entre las emociones propias y las de los demás. Abarca saber qué factores causan la emoción, reconocer cómo cambian las emociones de uno con el tiempo y saber cómo el comportamiento de uno influye en las emociones de otras personas.
  • La autorregulación es la capacidad de ejercer cierto control sobre las emociones e impulsos negativos a través de estrategias de afrontamiento como buscar retroalimentación positiva, desarrollar relaciones positivas con las personas, limitar el tiempo dedicado a actividades que provocan sentimientos negativos.
  • La motivación es poder mantenerse motivado en una tarea o meta a pesar de los obstáculos y dificultades
  • La empatía es la capacidad de identificarse y comprender las experiencias de otra persona sin necesariamente compartir a ellos. O bien, la capacidad de un individuo comprender y compartir los sentimientos de los demás.
  • Las habilidades sociales escala hacia la capacidad del individual en liderar aprovechando las relaciones sociales y puesta en práctica de los cuatro componentes mencionados anteriormente. Así pues, las habilidades sociales, dentro de la inteligencia emocional, no se limita a una simple relación del individuo con su entorno.

La inteligencia emocional en las empresas y organizaciones. ¿Cómo aplicarlo?

Las organizaciones deben dotarse de profesionales que dominen la habilidad de la inteligencia emocional para diseñar planes de desarrollo interno y potenciar esta habilidad a los diferentes integrantes de la organización. Para ello se deberá.

Analizar y evaluar los niveles de inteligencia emocional de tu negocio

La inteligencia emocional se puede medir mediante el uso de una prueba EQ. El test EQ es un cuestionario de autoevaluación que mide tu nivel de inteligencia emocional en cuatro escalas: autoconciencia, habilidades sociales, empatía y manejo del estrés.

A su vez, el análisis deberá determinar el grado de inteligencia emocional de la organización. Las siguientes son 5 señales de que su empresa tiene altos niveles de inteligencia emocional:

  • Los empleados se sienten cómodos consigo mismos y con sus compañeros
  • La empresa brinda oportunidades para que los empleados crezcan profesionalmente.
  • Los empleados están abiertos a la retroalimentación de sus gerentes.
  • Los empleados tienen un sentido de autonomía en su trabajo.
  • Los empleados valoran la diversidad en el lugar de trabajo.

Diseño del plan de desarrollo de competencias emocionales

Tras el análisis y determinación de la situación actual, se deberá diseñar un plan de desarrollo de competencias emocionales, el alcance de dicho plan deberá abarcar toda la organización, empezando por la dirección que debe apoyar las iniciativas y ponerlas en prácticas para asegurar el éxito del plan.

A niveles inferiores se deberá ofrecer contenidos como los disponibles en Mentee, formación y talleres sobre inteligencia emocional, seguimiento, medición y evaluación de las mismas para optimizar y cumplir con los objetivos.

En conclusión

En el futuro, veremos cada vez más empresas que invierten en formación en inteligencia emocional para asegurarse de cuidar aspectos de la motivación, la productividad y la eficiencia en los recursos humanos.

Por ello, el factor de diferenciación es adelantarse y empezar a diseñar el plan de desarrollo emocional en tu organización.

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